El año que empezó con bajante del río se despide con una emergencia hídrica en Santa Fe

El inicio del 2023 tuvo un verano de aguas bajas, en consonancia con lo que sucedió desde mediados del 2019 y que se sostuvo durante tres años con una bajante extraordinaria del río Paraná que trajo consecuencias a la ciudad de Santa Fe y toda la región del litoral.

Tras la sequía prolongada por efectos del fenómeno climático de La Niña, el panorama mutó durante el año y comenzó a consolidarse El Niño (a partir de octubre), que tiene como característica principal la generación de importantes precipitaciones, muchas veces ocasionadas en cortos períodos de tiempo.

La playa de la costanera este durante el verano pasado. Foto: Fernando Nicola

En estas condiciones se termina el año. Con el río en Santa Fe en niveles de alerta, una vasta cantidad de días inestables y con una emergencia hídrica que solicitó el Ejecutivo Municipal al Concejo Deliberante de Santa Fe. Los especialistas advierten que la tendencia del río continuará en crecimiento y se espera que el pico llegue entre marzo y abril del 2024.

En emergencia

La crecida del río Paraná generó que varios barrios costeros de la capital provincial queden anegados y el agua ingrese a las viviendas. En consecuencia, los vecinos de La Vuelta del Paraguayo que no tenían dónde resguardarse fueron traslados a módulos de emergencia instalados a la vera de la ruta 168. Además, otros de los distritos complicados por el agua son Colastiné Sur y La Boca (Alto Verde).

Para poder contar con una herramienta administrativa que agilice las soluciones y así atender las complicaciones que apareja la creciente, el intendente Juan Pablo Poletti solicitó al Concejo santafesino que declare la emergencia hídrica, algo que sucedió el pasado 12 de diciembre.

"Esta ordenanza brinda una herramienta administrativa al Ejecutivo Municipal para tomar decisiones y habilitar compras con la celeridad que amerita la situación que está transitando la ciudad en relación al avance y crecida del río Paraná y las lluvias intensas que puedan ocurrir en el marco del fenómeno de El Niño", destacaron en un comunicado desde el deliberativo local.

La emergencia se extenderá por el término de 120 días corridos, prorrogable por el Departamento Ejecutivo Municipal por igual término. En su artículo 2, la ordenanza aprobada autoriza al Ejecutivo Municipal a arbitrar los medios y ejecutar las acciones que estime para la adquisición de bienes y/o contrataciones de servicios; realizar obras e infraestructura para mitigar los efectos de la emergencia hídrica, prescindiendo del correspondiente llamado a licitación pública o procedimiento de selección de contratistas, y lo faculta a concertar las contrataciones directas o procedimientos que garanticen la debida concurrencia de oferentes, tratamiento igualitario de los mismos, cotejo de ofertas y condiciones análogas.

Además, se incluyó un artículo para autorizar al Ejecutivo a suscribir convenios de manera directa con el gobierno nacional y provincial, y demás organismos públicos o privados, en caso de que se requiera autorización del Concejo Municipal, con posterior informe al mismo. Por último, la ordenanza establece que el Ejecutivo Municipal deberá enviar al Concejo un informe mensual donde detalle lo actuado. Para evaluarlos, se conformó una comisión que estará integrada por los concejales participantes del Comité de Gestión de Riesgo Municipal.

Las mediciones hidrométricas de la Prefectura Naval Argentina en el Puerto Santa Fe. Foto: Captura digital

Río lleno

A las imágenes del verano 2023, en las que las playas eran extensas sobre las costas santafesinas, este diciembre se despide sin arena disponible para que los santafesinos disfruten de la laguna Setúbal.

Si nos remontamos a la medición más baja que registró el hidrómetro del Puerto Santa Fe en el 2023 hay que retroceder hacia el 15 de enero cuando el río tenía un nivel de 0,32 metros. Luego la altura comenzó a repuntar y la bajante extraordinaria empezó a quedar atrás.

Actualmente, tras las importantes precipitaciones que empezaron a ocasionarse en el sur de Brasil desde octubre pasado, toda la cuenca del Paraná está llena. Donde antes quedaban bañados y arroyos desconectados por la bajante, ahora estos puntos están llenos y desbordados. Por este motivo, las lluvias que de ahora en más se generen aguas arriba de Santa Fe, representarán un pulso importante para la zona de influencia de Santa Fe y su área metropolitana.