Evaluación de su comportamiento
El INTA Reconquista presentó un informe sobre la siembra de trigo en la región
La recorrida anual de los ensayos de trigo, realizada en el marco de la Red de Cultivares de ese cereal, tuvo lugar en la Estación Experimental de la cabecera del Departamento General Obligado.
La importancia de estos ensayos radica en la evaluación de los cultivares de trigo en las condiciones ambientales de la región, donde el rendimiento del cultivo está fuertemente influenciado por las particularidades de un clima de transición, entre templado y subtropical.
Esta red está coordinada por el Instituto Nacional de Semillas (INASE), y en ella participan los cultivares que los semilleros deciden producir como semilla fiscalizada.
Desde el grupo de manejo de cultivos, de INTA Reconquista, se compartió información sobre las particularidades de este cultivo en el norte de Santa Fe. Durante la jornada, se presentaron 66 cultivares comerciales en cuatro fechas de siembra.
Se resaltó la importancia de estos ensayos en la generación de información sobre el comportamiento productivo y la sanidad, aspectos cruciales para tomar decisiones a la hora de elegir qué cultivar.
Se subrayó que el rendimiento es una respuesta a la adaptación a las condiciones ambientales de la región. Dado que el potencial ambiental es menor en comparación con la zona triguera típica, es fundamental que los cultivares seleccionados se adapten bien y mantengan un buen comportamiento en términos de sanidad.
Sanidad
En cuanto a la sanidad, se presta especial atención al comportamiento frente a las royas, que son enfermedades frecuentes en la zona. Históricamente, la roya de la hoja ha sido la enfermedad más común, pero en las dos últimas campañas, se ha observado en un alto porcentaje de cultivares la roya del tallo, lo que agrega una preocupación adicional.
La gestión del agua es otro factor esencial en la producción de trigo en la zona, en un contexto de inviernos secos. La elección de un buen cultivo antecesor, como el girasol, y la determinación de la humedad en el perfil del suelo antes de la siembra son prácticas esenciales.
La fecha de siembra también es un punto crítico, y se enfatizó su relevancia en el rendimiento del cultivo, afirmando que "es el pilar fundamental cuando hablamos de producir trigo en esta zona", según Ana Brach, de INTA Reconquista.
Se debe encontrar un equilibrio delicado para evitar tanto las heladas como las altas temperaturas durante el llenado de grano. También, se alentó a los productores a considerar una variedad de ciclos intermedios y cortos para aprovechar al máximo el potencial ambiental.
Rendimiento
Al elegir qué cultivar de trigo sembrar, se tiene en cuenta rendimiento, comportamiento sanitario, ante otras características. El cultivo antecesor, que permita acumular agua en el perfil de siembra, la fecha de siembra son factores clave en el manejo del cultivo.
Es fundamental para el éxito del cultivo de trigo en la región, equilibrando el riesgo de heladas y las altas temperaturas que pueden afectar su desarrollo. La elección de una fecha de siembra adecuada permite que el periodo crítico del trigo coincida con las condiciones ambientales más propicias para maximizar el rendimiento. La diversificación de variedades de ciclos intermedios y cortos se promueve como una estrategia para aprovechar al máximo el potencial ambiental y reducir la presión de enfermedades.