Algodonera Avellaneda
Se concursó una textil de Vicentin que le debe U$S 300 millones al Nación y no puede pagar la luz
Este lunes, el juez Fabián Lorenzini se declaró competente para entender en la causa. El magistrado otorgó un plazo a la firma para completar documentación. Finanzas deficitarias y energía cortada.
El pasado 12 de noviembre, Algodonera Avellaneda presentó la solicitud de apertura de su concurso preventivo de acreedores en los Tribunales de Reconquista con las firmas de Héctor Francisco Vicentin y Dionisio Amado Moschen (presidente y vicepresidente de la sociedad), y bajo el patrocinio letrado de los abogados Guido Ferullo, Javier Alegría, Héctor Vizcay y Alejandra Ferullo.
En vista del pedido expresado por la firma, este lunes el juez Fabián Lorenzini declaró la competencia del Juzgado Civil y Comercial de la Segunda Nominación de Reconquista a su cargo a los fines de "sustanciar el pedido de apertura de concurso preventivo" de la sociedad privada, propiedad de Vicentin SAIC.
En la resolución, concedió a AA una prórroga de diez días hábiles, computables a partir de la fecha de la presentación inicial, para que cumplimente los recaudos de la Ley de Quiebras.
En cuanto a la composición del patrimonio de la textil norteña, el magistrado indicó que el 31 de octubre concluyó un nuevo ejercicio económico de la sociedad solicitante de un proceso de crisis por insolvencia. "Conforme surge de los propios balances acompañados con la solicitud, Algodonera Avellaneda acumula pérdidas desde -al menos- el año 2019 a la fecha", señaló, en tanto requirió a la empresa un "esquema de transición empresario, previendo cómo pretende afrontar la situación de crisis que se presentará desde la apertura del concurso".
El Banco de la Nación había iniciado acciones judiciales contra la pretensa concursada en su calidad de garante y este hecho "impactó negativamente en las posibilidades de continuar financiando su propio capital de trabajo de manera eficiente", reflejó el fallo del juez Civil y Comercial.
Paralelamente, intimó a la algodonera a acompañar la documental que "acredite el saldo impago de los servicios públicos de energía eléctrica y el corte del mismo sufrido en las plantas de Santiago del Estero y Chaco", y fijó una audiencia a celebrarse el próximo jueves 5 de diciembre, a las 11, para escuchar a las partes.
Asimismo, convocó a una asamblea de accionistas para un día antes en la sede social de la industria para "recibir la ratificación de parte del órgano soberano societario" con respecto a la demanda concursal.
Estrés financiero
El decisorio del juez Lorenzini recogió los argumentos esgrimidos por los directivos de AA para concursarse, en los que sobresalen "las dificultades económico/financieras que habrían originado el escenario en el cual se adoptó la decisión de peticionar la protección judicial para lograr el acuerdo de pago con los acreedores de la firma".
En esa línea, mencionó lo expuesto por Vicentin y Moschen respecto a que "a principios del año 2020 fue necesario realizar fuertes cambios en la gestión de sus negocios sociales, fundamentalmente por las restricciones financieras que sufrió como consecuencia de seguir garantizando con hipoteca sobre el inmueble donde funciona la hilandería, una línea de crédito del BNA por U$S 300 millones a favor de Vicentin SAIC (hoy concursada)".
El Banco de la Nación había iniciado acciones judiciales contra la pretensa concursada en su calidad de garante y que este hecho "impactó negativamente en las posibilidades de continuar financiando su propio capital de trabajo de manera eficiente", reflejó el fallo del juez Civil y Comercial, y agregó que los directivos "aseguraron que todo lo anterior obligó a la empresa a reconvertir su funcionamiento a la modalidad de prestación de servicios a fazón" para otras empresas comerciales.
De acuerdo a dictamen judicial, en la fundamentación del pedido concursal la conducción de AA precisó que desde el ejercicio económico cerrado en el período 2018-2019 la sociedad comercial viene arrojando magros resultados, un cuadro que se vio agravado a partir de enero del corriente año donde "la caída de la producción fue dramática generando, una capacidad ociosa superior al 50 % sin posibilidad de ajustar la estructura de personal de la compañía”.
Energía en rojo
En el informe de situación, consta que el 20 de agosto de 2024 los empresarios acordaron con los sindicatos reducir la jornada laboral y los días semanales, hasta el 30 de noviembre. Y que, con relación a la cesación de pagos de servicios, la misma quedó evidenciada cuando "no fue posible abonar los consumos de energía provistos por la Empresa Provincial de la Energía (EPE), del mes de septiembre de 2024”, un hecho que puede provocar el decaimiento de la reestructuración de deuda acordado por el convenio suscripto con prestataria el 11 de noviembre para regularizar las facturas de energía eléctrica de la hilandería, correspondientes al período de noviembre de 2022 a junio de 2024.
AA sufrió restricciones financieras como consecuencia de seguir garantizando con hipoteca sobre el inmueble donde funciona la hilandería, una línea de crédito del BNA por U$S 300 millones a favor de Vicentin SAIC (hoy concursada), alegaron el directorio.
Lorenzini puso el foco en dos cuestiones que a su entender aparecen incompletas: para comprender cabalmente la situación patrimonial, financiera y comercial, como así también la posición de caja y viabilidad de los negocios de la sociedad peticionante, se "requerirán informes complementarios del estado detallado del activo y del pasivo".
En tanto, se mostró interesado en conocer a qué alude los solicitantes cuando se refieren a la materia prima que podría exportarse y cobrarse con “cláusula roja”, puesto que el párrafo donde esa explicación se viene desarrollando, "se interrumpe luego de una descripción genérica del negocio algodonero sin explicar cómo esta situación jurídico-comercial ha incidido en el caso particular".
También centró su atención en la utilidad comprender y dimensionar, a los fines de establecer los horizontes de este proceso colectivo, "cuáles son los alcances y condiciones de vinculación de Algodonera Avellaneda SA con eventuales empresas en las cuales pudiera ostentar tenencia accionaria y/o algún grado de intercambio de bienes o servicios", como por ejemplo los negocios que actualmente vinculan a la sociedad con la Unión Agrícola de Avellaneda y con Buyatti SAICA, quienes sostienen contratos de fazón en las plantas de desmote de fibra y desarrollan con la empresa en cuestión una especie de alianza de negocios que puede resultar relevante para el desarrollo de su actividad en los próximos meses y campañas agrícolas.
Para el juez, a fin de dilucidar la apertura de concurso es necesario profundizar el análisis de la "eventual responsabilidad de sus administradores en orden a su deber de anticipar la situación acuciante que vienen a exponer en este momento".